El artista holandés, Daan Roosegaarde, ha llevado a cabo un innovador proyecto de seguridad vial que permite que las líneas longitudinales de la carretera se iluminen gracias a la energía solar que almacenan durante el día. Esto se debe al curioso sistema que absorbe la energía de los rayos del sol e ilumina las líneas de la carretera, pintadas con polvo luminiscente durante 8 horas en la oscuridad. También incluye señales de pintura similares solo activadas en determinados casos en los que la climatología lo requiera, como por ejemplo, advertencias en la calzada sobre el hielo además de otras patentes como el arcén con capacidad de recarga por inducción para los coches eléctricos o los guardarrailes que se iluminan en las curvas para advertir que viene otro vehículo en sentido contrario.
Todo esto se ha realizado en la autopista holandesa N329, a 100 kilómetros al sudeste de Ámsterdam, cuyo objetivo ecológico es el ahorro energético y la eliminación de las farolas y por tanto, el riesgo de impactar contra ellas.
Puede que este plan vaya encaminado a una futura carretera inteligente o Smart Road, más segura, sostenible y atractiva para los conductores.
A continuación les dejamos un vídeo: